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lunes, 20 de diciembre de 2010

TALENTO COLONIAL

La sede de Colonial dice presente en el marco de las celebraciones por nuestros próximos 50 años institucionales. A continuación, cuatro testimonios de artistas que cumplen muy bien en sus respectivos puestos.

Leonardo Santillán Pineda cursó el ciclo Semestral Básico en nuestra academia César Vallejo y es postulante a Arquitectura. Es uno de esos chicos tranquilos que, a primera vista, no parecen matar ni una mosca. Conozcamos un poco más de este fanático de la guitarra y el teclado.


¿Cómo te iniciaste en la música?
Aprendí tocando con la guitarra de papá. A los once años recuerdo que salí en una actuación del colegio a tocar la zampoña. Luego fui cultivando los demás instrumentos.

Digamos que la diversidad estuvo presente desde el inicio...
Sí. En lo particular, me gustan mucho las fusiones, en especial el rock-blues.

¿Qué perspectivas en los referente a tus estudios?
En realidad, a mí me gustaría ser músico profesional, me apasiona la idea de poder componer partituras. Sin embargo, como siempre, mis padres insisten en que siga una carrera en la universidad (Arquitectura), por lo cual pienso hacer un ciclo Anual más en la academia. Además, voy a complementarlo con estudios de computación, los cuales me permitirán ayudar a mi padre en su empresa de cableado.

¿Será posible hallar algún punto en común entre la Arquitectura y el arte?
Bueno, tanto en la Arquitectura como en el arte, es fundamental la precisión: así como en la composición de una estructura buscamos el equilibrio y la exactitud de los trazos, así también en la música, la concordancia en los compases.

¿Cómo distribuyes tu tiempo en época de academia?
De ocho a una, clases; de dos a siete, repaso y de siete a diez, a tocar guitarra.

¿Cómo empezó lo del elenco de música de la sede de Colonial?
Un amigo del aula me pasó la voz de que estaban convocando para un taller de música, así que llegué con la idea inicial de que iba a aprender más de lo que ya sé; sin embargo, una vez dentro, me di cuenta de que se trataba de un elenco y que íbamos a participar muy pronto en un concierto (el Acto Cultural de la sede). Así que empezamos a ensayar todos los jueves, de dos a cinco, con el profesor Walter Santillán. Hacemos huaynos, valses y también marineras.

¿Solamente tocas en la sede de Colonial?
No. he formado con unos amigos de mi barrio del Callao un grupo de rock que se denomina Discreto.

¿Qué artistas te gustaría ver el próximo año como parte de las celebraciones por nuestros 50 años?
Me gustaría ver a Amén, Libido y Mar de Copas.


Leonardo quiere ser Arquitecto

Jesús Ramírez Barrientos, empleado del área de Mantenimiento de la sede de Colonial, es integrante del elenco de Música Latinoamericana del Centro Cultural Aduni, pero también apoya al elenco de música de su sede. Toca el bajo, ya que, según nos dice, es el corazón de toda orquesta, pues lleva el compás, al igual que la batería.

¿Cómo llegaste al Cecad?
El año 2007 hubo un casting en el Cecad y logré pasarlo. Allí empecé con la guitarra y poco a poco me fui habituando al bajo.


Y te incorporaste a la plana de empleados...
Sí, porque quería conocer más de la institución, compenetrarme con su forma de trabajo y poder ser una persona integral.

¿Cómo podemos ligar la música al trabajo académico?
Yo creo que se deben hacer esfuerzos para difundir nuestra enorme diversidad cultural. Una manera sería que los músicos nos convirtamos en maestros profesionales y enseñemos a tocar y a valorar el arte. Desarrollando mejores músicos le damos relevancia mundial a lo nuestro.

¿Cómo vives esta dinámica de aniversario?
En lo personal, siento una gran alegría de ver tantas actividades culturales por aniversario. Yo sueño con que todo esto sea el inicio de una nueva era en nuestra institución: la del trabajo cultural a fondo, en todos los niveles de la educación, desde la niñez hasta la adultez.


Jesús Ramírez, músico de la plana de Empleados

Juliana Carhuamaca Amaro nació en Tarma y llegó a Lima en el 2003. Actualmente es bióloga de profesión y forma parte de la plana de Biología de nuestra academia Aduni. Tiene una tesis que se titula, curiosamente, Genotipificación del Helicobacter Pylori, y otra, de nombre Validación de la tećnica Elisa Bzt para el diagnóstico de hidratosis en Tarma. Hoy forma parte del elenco de danzas peruanas de la sede de Colonial

¿Desde cuándo practicas la danza?
Desde que tenía 6 años. Siempre me gustó el flamenco, la cumbia colombiana, un poco de zarzuela y música árabe.

Y estudiaste Biología para...
Comprender mejor a los seres vivos y sus enfermedades y así poder darles solución.

¿Te preparaste en Aduni?
Sí. Fui alumna en el ciclo Anual San Marcos el año 2001 en el local de Huancavelica.

¿Qué te parece el trabajo cultural en la institución?
Ha sido mucho más notorio en estos últimos meses. El cambio principal es que ahora participan todos: profesores, empleados, auxiliares, estudiantes.

¿Qué aspectos positivos ves en el cultivo del arte?
Yo creo que la práctica del arte permite revalorar lo peruano. También nos permite a nosotros, los integrantes de la sede, preparar las actividades por aniversario. Yo creo que, en general, debemos practicar todo tipo de arte, pues la discriminación es también una forma de alienación. Lo nacional es tan valioso como lo que viene de afuera.


Experta en Biología, Juliana deslumbra en la danza

Erick Olórtegui Calampa nació en Yurimaguas y llegó a Lima en el 2008. Actualmente es auxiliar del área de Dirección Académica e integra el elenco de teatro de la sede. Recientemente participó en el estreno de la obra Harakiri, una tragicomedia sobre el drama de la vida humana en los tiempos actuales.

¿Cuál es tu personaje en Harakiri?
Hago de Kenya Nakamura, un hombre que quiere quitarse la vida debido a las constantes vicisitudes que le ocurren. Creo que, por sus características, el personaje y la obra en sí han tenido una muy buena acogida.

¿Qué estudios has realizado?
Soy egresado del Instituto Cesca, donde estudié Computación e Informática. Me gustaría ser un experto en redes y seguridad informática. Mi pasatiempo favorito es la investigación.

¿Cuál es tu percepción acerca de la institución?
Yo creo que nuestra institución es buena porque nos ayuda a formarnos como personas en todo sentido. También valoro mucho la flexibilidad que nos dan para poder avanzar académicamente, a la par que el trabajo.

¿Y la sede?
Antes de llegar a Colonial procedente de la sede de Bolivia, sentía que las cosas iban a ser difíciles. Sin embargo, me he dado cuenta, sobre todo últimamente, lo activa que es esta sede: existe un área de Cultura y Promoción del Deporte que mueve mucho a todos los integrantes. Los alumnos de este local están llenos de iniciativa.


Erick, protagonista de Harakiri


Nuestros integrantes modelo de la sede de Colonial



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